Toma tonos marrón oscuro, de trama densa y tonalidad bien definida. En la nariz, regala notas muy intensas y complejas de avellana del Piamonte y tostado de frutos secos, polvo de cacao y gianduia (pasta de avellana y chocolate) con toques vegetales. Al paladar es dulce, muy suave y súper equilibrado con un final persistente. Combina de diez con chocolate, leche, café, yogur y cremas frías. Es el ingrediente perfecto para hacer la especialidad más querida por los chicos, el Kids Mokaccino. Categorías top: cafetería (fría y caliente), heladería y pastelería.